Equilibrio de la flora vaginal: Las cepas probióticas ayudan a mantener un pH vaginal saludable, previniendo infecciones y trastornos de la flora vaginal. Prevención y tratamiento de infecciones: Contribuye a la prevención de infecciones vaginales, como la candidiasis y la vaginosis bacteriana, restableciendo el equilibrio de la microbiota. Acción inflamatoria e inmunomoduladora: Las cepas probióticas tienen un efecto positivo en el fortalecimiento de la respuesta inmune local, ayudando a prevenir infecciones e inflamación. Mejora de la salud Íntimo: Ayuda a mantener la salud vaginal y aliviar síntomas incómodos, como picazón y secreciones anormales.
Lactobacillus reuteri, Lactobacillus rhamnosus, Fibras prebióticas, Excipientes (como celulosa y dióxido de silicio), Lactosa (en cantidades mínimas, generalmente no afecta a la mayoría de personas con intolerancia).